Convertir un local en vivienda es, desde hace algún tiempo, una tendencia al alza. Por un lado, a causa de un parque inmobiliario que no cubre la demanda en determinadas zonas urbanas y, por otro, por la necesidad de una parte de la población de acceder a casas más asequibles.
Locales comerciales a pie de calle, oficinas y hasta pequeños almacenes o naves están así cambiando su uso para convertirse en viviendas, en algunos casos incluso de auténtico lujo. Sin embargo, para conseguirlo es imprescindible seguir una serie de pasos.
Pasos para convertir un local en vivienda
1. Estudio de viabilidad
Poder convertir un local en vivienda está condicionado por dos factores. Por un lado, que las ordenanzas municipales permitan ese cambio de uso. Por otro, que la zona en la que se encuentra el local no haya alcanzado el máximo de densidad de viviendas establecida también por la normativa local.
A ello, hay que sumar que, si el local se encuentra en un edificio, es necesario contar con el permiso de la comunidad de propietarios. Antes habrá que comprobar los estatutos para saber si está permitido o prohibido. Lo habitual es que no esté especificado, por lo que, sería necesario negociar con la comunidad de vecinos.
2. Inspección del inmueble
Es posible convertir un local en vivienda siempre y cuando aquel cumpla una serie de requisitos, en especial adaptarse al Código Técnico de la Edificación y a lo que se considera superficie habitable. En esta última cuestión entran en juego aspectos como las dimensiones del local, la accesibilidad, la ventilación o la iluminación, entre otros.
Los ayuntamientos pueden plantear otras exigencias, como que la fachada sea de una longitud determinada, que los huecos para iluminación natural tengan una superficie mínima o que ninguna pieza habitable esté por debajo del nivel de la acera.
Lo ideal es que sea un técnico cualificado quien realice una inspección visual para determinar las posibilidades reales de convertir el local en vivienda. Además, conviene solicitar un Informe de Compatibilidad Urbanística en el Ayuntamiento.
3. Realización del proyecto técnico y obtención de licencia
Si no hay ningún inconveniente para convertir el local en vivienda, será el momento de la redacción del proyecto técnico de cambio de uso. Debe hacerlo un profesional competente y presentarse visado en el Ayuntamiento. Además de ello, hay que abonar las tasas municipales correspondientes y el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO).
En lo que respecta a la licencia, depende de cada Ayuntamiento. Algunos exigen la presentación de una solicitud de obra, en este caso mayor. Otros, en cambio, admiten la presentación de una declaración responsable.
4. Ejecución de la obra
El siguiente paso sería la reforma para acondicionar el local y convertirlo en habitable. Esas obras deben respetar en todo momento el proyecto técnico presentado al Ayuntamiento y deben estar dirigidas por un técnico, normalmente el responsable de la redacción del documento.
5. Legalización, último paso para convertir un local en vivienda
Finalizada la reforma, lo siguiente es solicitar la licencia de primera ocupación, presentando el certificado de fin de obra en el Ayuntamiento. Una vez obtenida, ya se pueden contratar los suministros básicos: luz, agua y gas. También hay que realizar nuevas escrituras y regularizar la nueva vivienda en el Catastro y el Registro.
Convertir un local en vivienda requiere tiempo y trámites, pero es posible. Si te estás planteando esta posibilidad de inversión, en Spainhouses encontrarás una amplia oferta de locales en la que puedes seleccionar los mejores de cada zona.
