Una de las actividades paralelas del Russian Meeting Point -que se ha celebrado en el marco del salón Barcelona Meeting Point (BMP)- ha sido una jornada en la cual agentes de la propiedad inmobiliaria (API) rusos han explicado a sus colegas españoles cómo tienen que tratar a los ciudadanos de la Federación Rusa que quieren comprar una vivienda en España. La jornada fue un éxito de asistencia y de participación y demostró el gran interés que despierta el cliente ruso en el sector inmobiliario español.
Una de las ideas más repetidas durante la charla fue que las inmobiliarias españolas deberían tener un socio ruso para trabajar adecuadamente en este mercado. Así lo defendió el presidente de los API de San Petersburgo, Valeri Vinográdov, y su homólogo de Samara, Dmitri Kostiunichev, quien lo argumentó de la siguiente manera: “Los inmuebles rusos y los españoles son muy diferentes, por eso, es muy importante contar con un socio local. Incluso aunque la información esté traducida, hay conceptos que no se entienden de la misma manera”.
El presidente de los API rusos, Grigori Poltarak, también insistió en la misma dirección y, aunque admitió que al principio la relación entre agencias rusas y españolas resultaba muy complicada y se produjeron muchos errores y malentendidos, hace tiempo que su empresa trabaja con Costa Activa, de Valencia, y es “un socio de gran calidad”.
Por su parte, Anita Tablada, de Investpravo, invitó a los asistentes a participar en la feria inmobiliaria Property Worldwide que se celebrará próximamente en Moscú, ya que “el cliente ruso necesita verles”. Además, “al ruso le gusta hablar con el director” y no con el comercial y quiere información en ruso y de buena calidad. “Aunque sepa inglés o español, prefiere leer en su idioma”.
¿Cómo es el comprador ruso? Se pregunta Grigory Poltarak y él mismo responde. “Los rusos compran bienes para su uso personal. No están interesados en los pisos en sí, en su rentabilidad, sino en qué les puede aportar la compra de una vivienda. No hay que ofrecerles un piso nuevo, sino una vida nueva”.
En este sentido, según Poltarak, “hay que explicarles aspectos como que el sistema educativo español es muy bueno o qué posibilidades de negocio existen porque pueden influir mucho en la compra de la vivienda. También qué deportes se pueden practicar o si hay campos de golf cercanos. Son cosas que hay que explicar en primer lugar.”
Valeri Vinográdov apuntó que “mis clientes compran sobre todo para ellos y para sus familias.” La mayoría de ellos tenían unos 20 años cuando se desmembró la URSS y ahora tienen alrededor de 50 “y quieren vivir bien. Sus negocios funcionan y empiezan a buscar un sitio donde retirarse”. ...continúa leyendo "«A los rusos hay que ofrecerles una vida nueva»"