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Cobrar la renta cada mes sigue quitando el sueño a millones de propietarios que tienen alquiladas sus viviendas. No es para menos, teniendo en cuenta que la morosidad en el alquiler creció un 8,49% en 2015. Esta es la principal causa que ha propiciado el aumento en la contratación de seguros de impagos de las viviendas en alquiler, un producto que desembarca en España en 2003. Según el Observatorio Español del Seguro de Alquiler, una de cada cuatro operaciones está siendo garantizada con una de estas pólizas que ofrecen las compañías de seguros, bajo la lupa de la Dirección General de Seguros. Una alternativa eficaz y más accesible que el aval bancario para protegerse de un inquilino moroso.

pisos eixample barcelona 1024x710 - Vivienda: Seguros de impago en el alquiler, o cómo protegerse del inquilino moroso

El hecho de haberse convertido en una alternativa real al aval bancario (al alcance del bolsillo de muy pocos inquilinos), explica su penetración. Así, "el propietario incrementa su universo de posibles arrendatarios, porque ¿cuántos interesados no conseguirían un aval hoy en día?", se pregunta César Crespo, subdirector General de Negocio de Mutua de Propietarios, aseguradora donde estas pólizas han crecido un 30% en 2016. Crecimiento que también se refleja en otras aseguradoras muy activas en seguros de impago como Arag, Das, Mapfre, Mutua de propietarios, Zurich, Caser o Catalana Occidente.

Aunque el aval es más efectivo que el seguro, "los requisitos exigidos suelen ser más estrictos y su contratación más costosa, además de que supone para el inquilino tener un dinero retenido en el banco, en concreto, 12.000 euros si el propietario solicita un aval por una anualidad de renta", dice Eduardo Fernández-Fígares, abogado experto en desahucios y responsable de Abogados Para Todos. Estos seguros no evitan ni los impagos ni las demandas de desahucio, aunque los minoran. "Con seguro, el impago está por debajo del 0,5%, mientras que sin esta póliza se mantiene por encima del 4,5%", afirman en Mapfre. Esta aseguradora, que comercializa este producto desde hace una década y que ha vendido nuevas pólizas por un importe superior al millón de euros en los dos últimos años, cree que "su crecimiento se debe al auge en los últimos años del número de viviendas alquiladas y a las necesidades que el cliente tiene a la hora de proteger los ingresos y preservar su vivienda".

El propietario sabe de antemano tres cosas: que cobra la renta, que tiene cubiertos los daños vandálicos (suele ser hasta un máximo de 3.000 euros) y que recibe asistencia jurídica para el desahucio, también hasta 3.000 euros. Son las coberturas básicas y tradicionales, aunque las compañías han ido añadiendo otras opcionales y pergeñando un producto más completo. Mutua de Propietarios acaba de incorporar la sustitución de la llave y el bombín tras el lanzamiento; la cobertura de impago de luz, agua y teléfono; la limpieza del piso tras la salida del inquilino; la posibilidad de comparar el estado del inmueble antes y después para valorar el retorno de la fianza; el certificado energético; y asistencia urgente de fontanería, electricista y cerrajería. Además, se hace un estudio de solvencia y viabilidad económica del inquilino, que no puede destinar más del 45% de sus ingresos al alquiler.

Pero es el cobro de las rentas la garantía más golosa. "La aseguradora paga al arrendador todas las rentas impagadas a partir del segundo mes (el primer mes es de franquicia y se suple con la fianza) y hasta el momento de la recuperación del inmueble. Como límite tendremos el número de mensualidades contratadas", dice el abogado Fernández-Fígares. El periodo de cobertura más habitual son 12 meses, aunque hay compañías como Arag que ofrecen seis, nueve, 15 y 18 meses. En cambio, "un aval bancario garantiza únicamente el importe que se haya depositado en él, de cuatro a seis meses generalmente", apuntan en Mapfre.

Aunque la mayoría de los propietarios contrata el seguro por miedo al impago, "la garantía que mayor uso e importancia tiene es la defensa jurídica", indican en Arag. Para que la maquinaria empiece a funcionar el casero debe notificar el primer impago a la aseguradora antes de los 45 días, es decir, antes del día 20 del mes siguiente. Entonces, "se efectúa una primera reclamación al inquilino para evitar la vía judicial. Si tras 10 días persiste la deuda, se presenta una demanda en el juzgado", explican en Arag. La aseguradora se encarga de interponer la demanda judicial de desahucio. "En ese instante, la compañía adelanta al propietario las cantidades impagadas hasta entonces, contabilizando el mes de franquicia que suple con la fianza, y posteriormente, hasta la fecha del desahucio, se le irán facilitando las mensualidades que está dejando de ingresar", aclara César Crespo. A la aseguradora le interesa que el proceso vaya rápido y minimizar las rentas que tiene que abonar. Una vez recuperado el piso, toca hacer recuento de siniestros, ya que también se hacen cargo de los posibles daños vandálicos que haya sufrido la vivienda.

El seguro básico para una cobertura de impago de 12 meses, la más contratada, tiene una tarifa de entre el 4% y el 4,5% de la renta anual, algo menos de dos semanas de alquiler. Si se contratan garantías adicionales sube al 6,5%. El precio de un aval suele estar en los 720 euros el primer año y 480 después.

No obstante, el mercado no solo vive de seguros. Hay compañías especializadas en alquileres que no creen en la utilidad de estas pólizas y afirman que más vale prevenir, optando ir a la raíz del problema para reducir la morosidad al 0%. "Se basa en la interposición de medidas preventivas, al contrario que los seguros, diseñados para cubrir e indemnizar en caso de siniestro, es decir a posteriori, cuando ya se ha producido el destrozo en la vivienda y los impagos", argumenta Antonio Carroza Pacheco, consejero delegado de Alquiler Seguro. Esta empresa realiza un estudio de solvencia y viabilidad de cada candidato, selecciona el mejor inquilino, consulta todos los ficheros de solvencia, incluido el Fichero de Inquilinos Morosos, y paga la renta a todos los propietarios los días 5 de cada mes.

Demanda activa, rigidez en la oferta y la alta rentabilidad en el alquiler

El crecimiento de la demanda de viviendas en alquiler y la rigidez de la oferta están provocando subidas en las rentas de los nuevos contratos que se realizan en algunas zonas de España, según se refleja en la tercera edición del Solvia Market View, el informe semestral sobre tendencias del sector inmobiliario. La oferta del alquiler en España, según el estudio, es "heterogénea, dispersa y gestionada sin una propuesta profesional de servicio". Concretamente, en España, el alquiler tiene más protagonismo en las grandes ciudades como Madrid y Barcelona, al registrar unos 40.000 contratos anuales.

Según el estudio, el mercado del alquiler está viviendo un cambio de tendencia derivado de la mayor necesidad de movilidad laboral y de flexibilidad a la hora de elegir un tipo de hogar. Por otro lado, también señala que el 97% de las viviendas de primera residencia en alquiler en España está en manos de particulares (aunque la mayoría gestionadas por inmobiliarias) y que el alquiler no siempre se concentra en las zonas donde hay stock de viviendas vacías. La entrada de operadores "que aporten profesionalidad y seguridad a los propietarios de vivienda" y la creación de grandes carteras empresariales son necesarios para el desarrollo del mercado de alquiler, ya que esto "contribuirá al aumento de la oferta de vivienda en régimen de alquiler".

Teniendo en cuenta la rentabilidad de la vivienda, el estudio señala que ésta se encuentra en el 6,11% con un precio medio de 1.377 euros por metro cuadrado. De este dato, el estudio señala que un 29% ofrece una rentabilidad bruta superior al 7%, un 49% oscila entre el 5% y el 7% y un 22% es inferior al 5%.

Por comunidades, Madrid, con una rentabilidad del 5,8% y con una renta media de alquiler de 7,6 euros por metro cuadrado al mes, es uno de los "focos" de mayor demanda de vivienda en alquiler en toda España. Cataluña, con rentabilidad del 6,1% y 7,4 euros por metro cuadrado al mes, ha registrado un repunte de los precios, especialmente en Barcelona. Por su parte, Valencia la rentabilidad media se ha situado en el 6,6%, en Andalucía en el 6,9% y en las Islas Canarias y Baleares en el 6,1%.

IPC Alquiler: En noviembre, los precios subieron un 0,1%

El precio medio de las casas y pisos en alquiler subió un 0,1% en noviembre en comparación con el mismo mes del 2015, según el Índice de Precios de Consumo (IPC) publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta manera, la evolución de los precios de los alquileres retoma la senda positiva y rompe con tres meses consecutivos de estabilidad (0%). Además, el diferencial con la tasa de IPC general (0,7%) se sitúa en seis décimas. En el acumulado del periodo enero-noviembre, la evolución de los precios de los alquileres muestra un repunte también del 0,1%.

Por regiones, el coste de los arrendamientos subió en Asturias (0,7%), Extremadura (0,6%), Baleares (0,5%), Andalucía (0,4%), Murcia (0,4%), Cataluña (0,4%), Comunidad Valenciana (0,3%), Canarias (0,3%), Aragón (0,2%), Galicia (0,1%), Navarra (0,1%). Mientras, los descensos en los precios de las viviendas en alquiler se dieron en Madrid (-0,7%), Castilla-La Mancha (-0,4%), Cantabria (-0,3%), País Vasco (-0,3%) y Castilla y León (-0,1%).

Fuentes: elpais.com y elmundo.es

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Los impagos continúan siendo uno de los grandes problemas que azotan al mercado del alquiler de viviendas en España. La mora en el pago de los alquileres se incrementó un 8,49% en 2015, según el Estudio sobre morosidad de arrendamientos en España 2016 del Fichero de Inquilinos Morosos (FIM). Aunque este porcentaje se ha reducido con respecto al dato de 2014 (12%), los expertos no dudan en alertar de que este problema es el principal lastre para que el sector del arrendamiento. Frente a su rentabilidad,  los expertos avisan de que mientras no haya seguridad jurídica contra los impagos, los propietarios no perderán el miedo a sacar al mercado sus pisos y, por lo tanto, la oferta seguirá siendo limitada.

oficina alquiler madrid 1024x684 - La morosidad en las viviendas en alquiler creció un 8,49% en 2015

Por comunidades, según informa el FIM, los mayores incrementos de la morosidad se han producido en Murcia (17,28%), Madrid (11,23%), Cataluña (10,9%), Baleares (10,84%) y País Vasco (10,3%). Asimismo, las regiones donde se han registrado una menor subida de la mora han sido La Rioja (3,9%), Castilla y León (3,95%), Navarra (4,3%), Galicia (4,68%) y Melilla (6,35%).

Por provincias, las zonas que han registrado un mayor incremento porcentual de la morosidad han sido Murcia (17,28%), Huelva (15,64%) y Barcelona (15,55%). Y las que menos, Ávila, donde ha descendido un 0,88%, Soria (1,15%) y Burgos (2,24%).

Por otra parte, el impago medio (importe medio por inscripción) en los 12 meses de 2015 asciende hasta los 6.424,99 euros. Las comunidades con los registros medios más elevados en este punto son Murcia (15.336,32 euros), seguida de Madrid (12.675,98 ), País Vasco (8.768,08) y Baleares (8.391,65). En el lado contrario se sitúan los territorios de Castilla y León (2.624,51), Extremadura (2.850,42), Aragón (3.389,80) y La Rioja (3.500,54).

En el apartado de la cuantía media adeudada, cabe destacan que los valores más elevados por provincias se dan en Murcia (15.336,32 euros), Madrid (12.675,98) y Guipúzcoa (10.707,39). Las zonas con los valores más bajos son Soria (882,89), Zamora (1.191,63) y Valladolid (1.911,92).

Barcelona y Madrid, donde más rápido se alquila una vivienda

Por otro lado, la firma VBare Iberian Properties, Socimi especializada en el sector de las casas y pisos en alquiler que iniciará próximamente su cotización en el MAB, ha realizado un estudio en el que concluye que el tiempo medio que empleado para alquilar una vivienda en las principales ciudades españolas oscila entre 2,5 y cuatro meses. Según el estudio, "el actual dinamismo del mercado del arrendamiento de viviendas en las principales ciudades españolas se manifiesta, además de en el encarecimiento de rentas, en la reducción de los tiempos necesarios para arrendar".

En este sentido, señala que Barcelona y Madrid encabezan la lista de ciudades con menores tiempos de comercialización, con un plazo promedio inferior a los tres meses. Otras urbes como Valencia, Málaga, Palma de Mallorca, Bilbao, La Coruña y Alicante bajan holgadamente de los cuatro meses, al igual que las ciudades de Zaragoza y Sevilla que rondan, de media, ese periodo de alquiler. "No obstante, estos promedios se ven drásticamente acortados en barrios con gran demanda y reducida oferta".

En concreto, el tiempo medio para alquilar una vivienda en Barcelona no llega a los dos meses y medio. Y en zonas como Vila de Gràcia, Poble-Sec, Sant Antoni o Sants-Les Corts se dan tiempos de en torno a dos meses, mientras que en Diagonal Mar este plazo asciende a tres meses y en Vallvidrera, el triángulo Urquinaona-Arc de Triomf-Gran Vía o la zona sur del Paseo de Gracia se registran más de cuatro meses y medio."Existe cierta correlación positiva entre el tiempo necesario y el valor de euros por mes, así como con el precio independiente de la superficie (euros/m2/mes)", según el estudio. "Así, a grandes rasgos, las zonas con mayor superficie media de la vivienda y con un precio de alquiler más elevado tardan más en encontrar inquilinos que barrios más accesibles con superficie más reducida". "La demanda es, en cualquier caso, intensa en toda la ciudad, y la desviación media entre los distintos micro-mercados (nivel de código postal) respecto al tiempo necesario apenas alcanzaría las dos semanas", informa.

En lo que respecta a Madrid, el periodo medio de comercialización quedaría ligeramente por debajo de tres meses. Tal como ocurre en Barcelona, los menores tiempos se registran en barrios periféricos de precio accesible, tales como la Villa de Vallecas o zonas del sur exteriores a la M-30 (Puerta del Ángel, Usera, Vista Alegre, etc.), mientras que en las áreas más exclusivas como el cuadrante sur del Barrio de Salamanca, Cortes-Jerónimos o el eje del Paseo de la Castellana el periodo de comercialización varía entre los tres y los cuatro meses. "No obstante, a diferencia del caso de Barcelona, no existe una relación significativa para el conjunto de códigos postales analizados entre el tiempo de alquiler y el precio del metro cuadrado al mes, en tanto que sí la hay entre dicho tiempo de alquiler y la superficie media de cada zona: a menor tamaño de viviendas, mayor facilidad de alquiler, y viceversa".

Una situación similar sucede en la capital de Vizcaya, Bilbao  con unos 3,3 meses de media y, en mayor medida Mallorca, con un tiempo similar al de Bilbao, Palma de Mallorca; y en Costa Blanca, Alicante (3,6 meses): zonas céntricas y de más elevada renta por metro cuadrado registran mayores tiempos de comercialización, mientras que ubicaciones periféricas y de precio más accesible lo ven acortado.

En cambio, en Sevilla (tiempo medio algo superior a cuatro meses) puede apreciarse una relación inversa entre ambas variables, cerrándose en el centro de la ciudad (mayor precio por metro cuadrado y mes) los alquileres con mayor celeridad, en comparación con barrios periféricos (con excepciones como Sevilla Este, con oferta reducida y buen ritmo de contratación).

En Valencia (3,2 meses) son los barrios más cercanos a la Universitat Politècnica (Torrefiel y especialmente Benimaclet) los que menor tiempo requieren para alquilar una vivienda, frente a zonas más céntricas y caras y también frente a áreas bastante alejadas del casco urbano (Poblados del Norte y del Sur). Mientras, en La Coruña (3,5 meses de media), la distribución de los distintos códigos postales de la ciudad respecto al tiempo de comercialización es bastante homogénea.

Según VBare, "se desprende de los datos que el mercado de alquiler goza de gran dinamismo en las principales ciudades españolas, con rapidez en la absorción de la oferta. Si bien, existen diferencias entre zonas de una misma población y entre las distintas ciudades en función de la estructura y naturaleza de sus respectivos mercados".

Fuente: elmundo.es

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El número de lanzamientos (desahucios) practicados en el segundo trimestre de 2016 experimentó un descenso del 1,9% respecto al mismo periodo del año anterior, al pasar de 18.739 a 18.391, según el informe “Efectos de la crisis económica en los órganos judiciales” que la Sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial. La cifra de desahucios practicados ha tenido reducciones superiores al 10% en Castilla La Mancha, Madrid, Navarra y La Rioja. Los lanzamientos afectan a distintos tipos de inmuebles, no solo a viviendas y, en el caso de éstas, no solo a vivienda habitual. Las ejecuciones hipotecarias bajan un 17,4%.

jacarilla alicante banco - La cifra de desahucios y ejecuciones en el segundo trimestre del año siguen bajando

El 53,9% de los desahucios (9.909) fueron realizados sobre alquileres, consecuencia de procedimientos derivados de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), mientras que 7.741 (el 42,1%) se derivó de ejecuciones hipotecarias y los 741 restantes obedecieron a otras causas. Los lanzamientos por impago del alquiler experimentaron un incremento del 0,5%, mientras que los derivados de ejecuciones hipotecarias bajaron el 4,7%.

Cataluña con 4.145 desahucios (el 22,5% del total nacional) fue la Comunidad Autónoma en la que se practicaron más lanzamientos en el segundo trimestre del año, seguida por Andalucía, con 3.007, y la Comunidad Valenciana, con 2.901. Estos tres territorios sumaron más de la mitad (el 54,7%) de todos los lanzamientos practicados en España en ese periodo.

Atendiendo solo a los lanzamientos consecuencia de alquileres (derivados de la LAU), la clasificación la encabeza también Cataluña, con 2.636; seguida por Madrid, con 1.285; Andalucía, con 1.269; y la Comunidad Valenciana, con 1.239. En cuanto a los resultantes de ejecuciones hipotecarias, Andalucía está a la cabeza, con 1.611, seguida por la Comunidad Valenciana, con 1.589; y Cataluña, con 1.306.

El informe incluye también el número de lanzamientos solicitados a los servicios comunes de notificaciones y embargos, aunque con la advertencia de que este servicio no existe en todos los partidos judiciales, por lo que el dato permite medir la evolución, pero no indica los valores absolutos. Además, el hecho de que un lanzamiento sea solicitado al servicio común no supone que éste lo haya ejecutado. Con estas premisas, los datos disponibles reflejan que el número de lanzamientos solicitados a los servicios comunes en el segundo trimestre de 2016 fue de 19.461, un 5,9% más que en el mismo periodo del año anterior. De ellos, 11.843 terminaron con cumplimiento positivo, lo que representa un descenso interanual del 0,9%.

Las ejecuciones hipotecarias bajan un 17,4%

El número de ejecuciones hipotecarias (proceso previo al desahucio) iniciadas en el segundo trimestre de 2016 fue de 14.380, lo que representa un descenso del 17,4% respecto a las 17.414 presentadas en el mismo trimestre de 2015.

El descenso en las ejecuciones hipotecarias presentadas se produjo en todas las Comunidades Autónomas excepto en Asturias, Cataluña, el País Vasco y La Rioja.

Por territorios, las ejecuciones hipotecarias presentadas en Andalucía con 3.491 (24,3% del total nacional), Cataluña con 3.046 (21,2%) y la Comunidad Valenciana con 2.056 (14,3%), representan más del 60% de las iniciadas en toda España.

Fuente: Consejo General del Poder Judicial

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La Comunidad de Madrid es líder con más de 33.500 contratos de alquiler bajo el arbitraje

pisos9 300x199 - Arbitraje inmobiliario: una fórmula cada vez más usada para evitar conflictosEvitar los problemas con los inquilinos o con los caseros de un piso en alquiler es cada vez más fácil y rápido. Es gracias a la fórmula del arbitraje inmobiliario, cada vez más conocido y usado en España. Este tipo de contrato de alquiler aporta seguridad jurídica y garantías para las dos partes firmantes en el contrato, asegurando una actuación rápida de la justicia si ocurre algún problema.

De hecho, la Comunidad de Madrid es líder en la firma de contratos bajo esta fórmula, con más de 33.500 según ha comentado el director general de Vivienda y Rehabilitación en funciones, Juan Van-Helen. Además, en 2008 Madrid creó el Consejo Arbitral para el Alquiler para gestionar eficazmente todos los casos.

Entre otras cuestiones, el arbitraje evita la morosidad de los inquilinos al actuar con rapidez, asegura el cobro de los impagos y ahorra costes en los procesos.