Como un velero mecido por el viento. Así es esta casa asomada a una preciosa casa en una bonita cala de la Costa Brava (Girona), arrullada por el sonido de las olas y rodeada por un paisaje de pinos mecidos por la brisa del mar. Calidez, naturaleza y mucha magia, es lo que ha logrado la interiorista Estrella Salietti, que se encargó de la decoración de esta fantástica y serena casa junto al mar. Sensación de libertad también en su interior, dominado por un suave gris azulado como color estrella en todos los ambientes, en carpinterías, techos y paredes, sofás, cojines y hasta el más mínimo de los detalles, en perfecta armonía con el blanco y la mágica luz del Mar Mediterráneo. “En realidad me inspiré en el color de las calas cercanas, explica Estrella. Allí surgió la idea, ¿por qué no copiar el mar y combinar el azul con el blanco de las olas? Sin duda, fue un gran acierto.
La casa, llena de amplitud, está pensada para compartir y disfrutar. El salón con una genial chimenea de obra y la terraza de verano son los dos lugares donde transcurren las horas en compañía, ya sea verano o invierno.“En realidad hay dos terrazas: una que da directamente al acantilado y otra trasera con una gran mesa de madera desnuda, más recogida, al abrigo del viento”. La gran sala de estar, con viguetas en el techo de madera blanca en encantador contraste con el gris azulado, está comunicada con la cocina con puertas de biombo translúcidas y extensibles para no perder la visión directa y tiene una original zona de comedor con dos mesas independientes, un gran aparador blanco y books suspendidos en los que se guardan vajillas, cubiertos, mantelerías... “Lo pensamos así, con estas dos mesas, porque no siempre la familia se reúne a la vez y así resulta más cómodo para todos". Comodidad junto al mar y calidez en una casa para los sentidos, en perfecto equilibrio junto a la naturaleza y el mar.
Costa Brava, cubriendo más de 214 kilómetros de litoral en la provincia de Gerona, es una zona ideal para vivir, descansar y disfrutar del mar. Pueblos marineros de paredes blancas. Un mar de aguas transparentes. Paraísos submarinos y parques naturales con parajes salvajes de un verde penetrante, frente a pequeñas calas encajonadas entre piedras y localidades turísticas como Lloret de Mar, Cadaqués o Roses. Costa Brava es una extensa franja del litoral de Cataluña orgullosa de sus tradiciones, cuna y fuente de inspiración de Salvador Dalí y depositaria de un impresionante legado histórico y monumental. Playas y calas (muchas de ellas reconocidas con la Q de Calidad Turística y la Bandera Azul) se alternan en lugares de fama mundial como las Islas Medes en L'Estartit (perfectas para practicar submarinismo) o las calas de Begur y Palafrugell. Pero además de sus espectaculares playas, la Costa Brava cuenta con espacios naturales impresionantes como el Parque Natural Cap de Creus en el Alto Ampurdán, el Parque Natural Aiguamolls de l´Empordà o el lago de Banyoles.
La herencia artística y cultural de la Costa Brava también se pone de relieve en su inmenso patrimonio histórico-artístico de un valor incalculable, que impresiona por su variedad. Poco a poco, sin prisas, y disfrutando de un paisaje de excepción, se pueden recorrer sus pueblos y admirar sus templos y monasterios románicos, como el de Sant Pere de Rodes, en el Port de la Selva, la Ciudadela de Roses, las ruinas greco-romanas de Empúries, el yacimiento arqueológico más visitado de Cataluña, el núcleo medieval de Pals o de Palamós, el recinto amurallado de Tossa de Mar, o un poco más en el interior, perderse por el inigualable casco antiguo de Girona, con sus calles sinuosas de piedras centenarias, o admirar en Figueres el arte del genio surrealista Salvador Dalí, el gran embajador mundial de la Costa Brava. Otras localidades con una amplia oferta de ocio y naturaleza para disfrutar en familia en el Bajo Ampurdán como son Calonge-San Antoni, Sant Feliu de Guíxols o Castell-Platja d’Aro.
Si además eres aficionado al golf, seguro que conoces la fama de los campos de Costa Brava como uno de los mejores destinos de todo el mundo. Miles de jugadores, y cada año más, optan por el litoral de Girona, en Cataluña para poner a punto su swing. La Costa Brava ha sabido incorporar atractivos que marcan la diferencia. Su localización es, sin duda, un valor fundamental: a orillas del Mediterráneo y limitada al norte por los Pirineos. En pocas palabras, una línea de costa privilegiada por el sol y los fantásticos paisajes resultado de la combinación de mar y montaña. Tiene a su disposición excelentes campos de golf en Gualta, en Caldes de Malavella, Navata, Lloret de Mar... Todos los alicientes en Costa Brava: Mediterráneo en estado puro para disfrutar de un entorno mágico de naturaleza, historia y mar.
Decoración: Estrella Salietti
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