Analizamos pros y contras del alquiler y la compra de casa
Antes de decidirte a comprar o alquilar casa, analiza los pros y los contras. España es un país con un sentido de la propiedad predominante, pero cada vez son más los que se plantean vivir de alquiler.
Al buscar piso se deben tener en cuenta tres factores que determinarán nuestro futuro hogar: 1) compra o alquiler; 2) dónde y 3) por cuánto.
La compra
Ventajas:
- Se trata de un bien que se revaloriza con el tiempo (aquí podríamos incluir un chascarrillo, pero ya tienen ustedes suficiente imaginación).
- La letra de la hipoteca puede suponer lo mismo que el importe del alquiler.Es un importante sistema de ahorro.
- El propietario tiene libertad para realizar todas las obras que quiera. Además, éstas contribuyen a revalorizar aún más la casa.
- Tiene ventajas fiscales.
- El comprador puede decorar y amueblar la vivienda como quiera.
Inconvenientes:
- Supone un gran desembolso inicial: apertura de hipoteca, registro, hacienda, escrituras o gastos de seguro son algunos de ellos.
- Gastos de comunidad.
- Conlleva muchas gestiones y papeleo en el banco, la notaría, la gestoría, etc.
- Por lo general, siempre se suele hacer alguna obra.
El alquiler
Ventajas:
- El gasto inicial es menor y no se necesitan grandes ahorros. Además, el mantenimiento suele correr por cuenta del dueño.
- El papeleo y las gestiones que se realizan son mínimos.
- En caso de equivocación, el fallo es menos trágico. Además, siempre existe la posibilidad de mudarse a un sitio mejor.
Inconvenientes:
- Es una inversión que no se revaloriza con el tiempo.
- A los cinco años, la subida de la renta resulta costosa.
- El inquilino depende de las normas del dueño más que de las de la comunidad.
- No siempre se puede hacer reforma y, si se hace, se puede perder la cantidad invertida.
El mayor problema que yo encuentro en la compra es que nunca sabes cuando la cuota dejará de subir. Nosotros compramos en 2006 una casa por 120000 euros semi reformada. La cuota era de 507 euros al mes. Al año siguiente la cuota era de 800 euros y cuando nos dimos cuenta ya no podiamos continuar con la reforma y no podiamos subsistir. Venderla fue un alivio y desde entonces vivimos de alquiler. Hemos tenido muchas oportunidades de compra pero no nos hemos atrevido y hasta el momento al comparar siempre sale ganando el comentario del "menos mal que no picamos ahora estaríamos ahogados".